El cerebro y el crujir de los alimentos -

Imaginemos que el cerebro es una gran sábana, que la hemos arrugado y la hemos puesto en una caja. Cada arruga del cerebro es un neurotrasmisor que está ínter relacionado...

Ocupamos solo una parte del cerebro, pero el cerebro reacciona, ante cualquier estímulo y también reacciona sobre los sonidos que provocamos al masticar los alimentos. Percibe los alimentos crujientes, como los alimentos más placenteros . 

Será necesario y fundamental dejar las papas fritas cuando comience su cambio de hábito, porque las papas fritas además de crujir, son altamente calóricas, adictivas, no proporcionarán saciedad y se irán a depósito de inmediato.

Las papas fritas aportan grasa saturada y están preparadas con EXCESIVA sal. Son la "mezcla fatal" de grasas y azúcares. En esta mezcla, los azúcares se metabolizan rápido y la grasa saturada, se irá a depósito violentamente (psinapsis).

Cuando se comienzan a comer alimentos tan estimulantes como las papas fritas, no podremos parar hasta que terminamos el envase. Limite estos alimentos que solo contribuirán a que abandonemos nuestra alimentación sana, por completo.

Los alimentos que crujen

Es un mito que todo lo que cruja engorda:

Los tallos de las zanahorias , el apio crudo (en cocido aporta calorías) o los pimientos cortados en tiras finísimas te obligan a masticar durante más tiempo y de forma LENTA , dando tiempo al cerebro a percibir que el estómago ya está saciado . Mantenga estos alimentos listos y preparados y cuando presente antojos, podrá incorporarlos a su alimentación sana y al cambio de hábitos alimenticios.

Myriam Cuevas Egaña

Obesidad En Linea